El dinamismo al que están sometidas las empresas en la actualidad es cada vez más exigente, observamos que la pandemia, la competitividad, la necesidad de innovación, el comportamiento del cliente y el avance de la tecnología son algunos de los elementos más contundentes para impulsar un cambio dentro de ellas para poder alcanzar las metas que se han planteado.
Ante esta enorme obligación es que se configura la gestión del cambio bajo una visión enteramente sistemática, se encarga de estructurar el paso de un punto A hacia un punto B y manejando todo lo que conlleva ese proceso, su impacto se reflejará principalmente en los objetivos, la operatividad, la tecnología y el desarrollo de los empleados. Tiene como propósito diseñar e implementar estrategias para controlar el cambio y acompañar a los trabajadores en esta transición.
La gestión del cambio es un proceso delicado que impacta en las personas principalmente a nivel mental y emocional.
¿Qué consideraciones se deben tener para llevar a cabo un cambio?
Tener en cuenta que toda acción tiene una reacción, cada modificación tendrá un impacto en la estructura organizacional, en sus procesos y en las personas, por tanto, es de suma importancia tener una meta clara, la planificación a detalle del camino a recorrer con una versión que permita hacer pruebas, un método para comunicarlo, programarlo, implementarlo, documentarlo y medir el efecto con los indicadores adecuados.
¿Qué clases de cambio organizacional podemos encontrar?
- Cambio estructural
Es la clase de cambio más frecuente, se puede iniciar implementando una nueva estrategia que afectará en la estructura de la empresa, se puede crear, modificar o dar de baja funciones, equipos, áreas, manuales, procedimientos, normas o el organigrama.
- Cambio tecnológico
Es un cambio en el que se invierte en la eficiencia y productividad con el fin de mejorar una gestión determinada con la adquisición de equipos, herramientas o automatizaciones. Es una clase de cambio que actualmente se encuentra bastante activa a raíz de la pandemia.
- Cambio en los procesos
Implica una revisión de los recursos funcionales en donde se clasificará la importancia de los procesos para su reestructuración, jerarquización o desaparición según se determine. Esta clase se divide en dos tipos:
a.- Cambio evolutivo: Se realiza de manera progresiva centrada en un objetivo concreto.
b.- Cambio revolucionario: Es un cambio drástico que se da en toda la organización.
- Cambio en las personas
En esta clase se trabaja en cambiar comportamientos, actitudes o percepciones que tienen los empleados respecto a la organización. Generalmente es una inversión en capacitación y desarrollo, en el manejo de nuevos valores, normas, actividades o reorganización de equipos de trabajo, también abarca la gestión del aprendizaje, la línea de sucesión y las recompensas así como la reestructura de la jerarquía de los líderes.. También abarca la reestructura en la jerarquía de los líderes.
La gestión del cambio es un proceso delicado que impacta en las personas principalmente a nivel mental y emocional, es un punto muy importante que se debe considerar también en el plan general como un apartado preventivo y de intervención en caso aparezcan episodios de ansiedad, estrés, inclusive tristeza, frustración, relaciones interpersonales conflictivas, entre otras afecciones.
Si tu organización tiene ideado un cambio, nosotros podemos ayudar con ese proceso, escríbenos a info@verandercorp.com.
Autor: Jaime Julca Mora
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